“Estamos tan desamparados
ante el nuevo mundo eléctrico como el nativo involucrado en nuestra cultura
alfabetizada y mecánica” Vivimos en el mundo de la tecnología, donde los
trabajos manuales y artesanales se han dejado a un lado y han sido remplazados
por computadoras, video juegos, reproductores de música, entre otros.
Es por ello, que decidimos
realizar nuestras fotografías a los artesanos, a los dioses del trabajo manual.
Nos enfocamos en los artesanos que están es las adyacencias del Ateneo de
Caracas, justamente en la plaza de los museos y los que están en el Boulevard
de Sabana Grande, que por ordenes de la Alcaldía del Municipio libertador, solo
pueden vender sus piezas los días martes y jueves después de las 2 de la tarde.
“El cambio de sentido más
importante se dio con la electricidad, que acabó con la secuencia haciendo que
todo sea más instantáneo” Por el hecho de la instantaneidad, decidimos realizar
las tomas fotográficas, con nuestros teléfonos celulares, aunque no sean de la
mejor resolución y el más alto pixelaje, compartimos con ustedes el trabajo
realizado por los artesanos. Algunos
venezolanos, otros inmigrantes, unos abiertos a ser fotografiados, muchos con
miedo al plagio de sus piezas.
Asimismo utilizamos los
teléfonos celulares porque actualmente son artefactos que poseen un gran nivel
tecnológico, especialmente en el área de las comunicaciones. Es más simple
ahora hacer llegarle a muchos una foto desde un celular que desde una cámara,
gracias a la mensajería instantánea y a las redes sociales tal vez la calidad de la imagen no es la más
profesional, pero el mensaje que se quiere transmitir logra su cometido
Es por
ello que presentamos 10 fotografías a distancia y a cercanía de las piezas de
arte de estos hombres y mujeres, realizadas manualmente y categorizados como una
pieza única.
“Cualquier medio es además
un arma poderosa con la que se puede destrozar a otros medios y grupos” es de
esta cita donde nos basamos para explicar el miedo que tenían los artesanos de
permitirnos fotografiar sus piezas, con una foto otro artesano puede hacer la
misma pieza y plagiar su idea principalmente, es la razón por la cual ellos que
tuvieron una actitud reacia con nosotras a la hora de tomar las fotos, nos
permitieron hacerlo siempre y cuando no se viera el producto final, es decir la
pieza ya elaborada al 100%.
Trabajo realizado por: Giuliana Armas, Adriana Camacho y Carol Acosta alumnas de sexto semestre de comunicación social en la Universidad Católica Andrés Bello